En una comuna hippie, se juntan varias maneras de ver la vida, y esto sirve al director para plantear actitudes ciertamente disidentes, diferentes y a veces estridentes sobre el mundo, las relaciones, la vida misma. Con algo de humor, y sin eludir cierta reflexión, pero sin pedanterías sesudas, el film muestra otras maneras de vivir la vida, y realiza una sutil crítica de algunas tendencias en principio subversivas en lo teórico pero complejas como poco en la práctica. De la teoría a la práctica, viene a decir la película, también hay bastante camino. Sin ser un film excepcional, ni en realidad lo que se entiende por cine político, muestra actitudes políticamente incorrectas, y otras que van siendo aceptadas, aunque a menudo a regañadientes.
~